Esta ha sido su trayectoria profesional hasta el momento:
Arquitecto en la ETSAM, por la Universidad Politécnica de Madrid en 1.991. Tras trabajar en diferentes estudios de Arquitectura, entra a formar parte del equipo de Arquitectura en Aguirre Newman en 1.995, habiendo desarrollado diferentes puestos, como Arquitecto y posteriormente como Directora de Proyectos de Implantación en la actual Savills Aguirre Newman. Proyectos significativos en los que ha trabajado desarrollando nuevos conceptos de workplace: Cepsa y Saint Gobain.
Permítenos conocerte un poco mejor ...
¿Qué es para ti la arquitectura?
Para mí, es el arte de poder expresar en espacio, luz y forma, nuestra forma de vivir, crear nuestro propio medio natural dentro de la naturaleza, pudiendo influir en cómo pensamos, cómo sentimos, cómo actuamos, crear una segunda piel que nos conecta con la naturaleza, racionalizada a nuestra escala.
La sostenibilidad y la arquitectura están cada vez más unidas…
Creo que la humanidad es cada vez más consciente de la importancia de respetar nuestra esencia, nuestro medio natural, el medioambiente que es quien nos lo da todo. La razón de ser de la arquitectura por si misma es sostenible dado que crea un hábitat seguro para el ser humano. Realmente, lo que ahora preocupa cada vez más, es hacerlo sin dañar el medio ambiente a corto, medio y largo plazo, ese es realmente el reto. La arquitectura nos tiene que ayudar a ser más felices, disfrutando de la luz, las vistas, la ventilación … , retornando al medio el bienestar que nos ofrece.
¿Cómo imaginas la arquitectura del futuro?
Creo que será una arquitectura en la que se van a desdibujar los límites, confluyendo las distintas actividades y funciones del ser humano, con una enorme interconexión con nuestro medioambiente, respondiendo a una sociedad plural, en la que la persona está en el centro y donde el espacio se convierte en un concepto “líquido”. Y esto es una realidad que está tomando mucha presencia en esta fase de pandemia. La arquitectura es un organismo vivo que crece, cambia y se debe adaptar a nuestra vida, tanto en la oficina, como en las viviendas, centros educativos o residencias o espacios de recreo y ocio. La tecnología toma un papel fundamental en nuestra vida.
¿Algún proyecto importante que estés trabajando y que nos puedas desvelar?
La mayoría de los proyectos en los que estamos trabajando en la actualidad, parten del estudio de nuestro comportamiento humano, y ahora especialmente ante la nueva situación que nos está tocando vivir, es decir la pandemia. Realmente, ésto va mucho más allá de un tema de salud, está cambiando y va a cambiar nuestros hábitos de conducta en todos los ámbitos de la vida, y por lo tanto de la arquitectura. La arquitectura, como en otras pandemias a lo largo de la historia, se convierte en parte de la solución al problema, dado que tiene que responder a las nuevas demandas de uso del espacio (apertura de espacios, flexibilidad, ventilación, innovaciones tecnológicas, etc…) Estamos trabajando en las nuevas formas de trabajo que están modificando totalmente el “paisaje de la oficina”, qué es, por qué y para qué vamos a la Oficina. Proyectos muy innovadores en este sentido son los que estamos desarrollando para Vodafone, L’Oréal.
¿Cuál es el lugar más curioso donde te has inspirado?
Creo que no hay un lugar, sino situaciones o vivencias y creo que todas las experiencias vividas con intensidad y pasión son focos de inspiración.
¿Algún proyecto soñado hecho realidad?
Creo que es el proyecto el que te lleva a soñar.
¿Qué te llevó a dedicarte a la arquitectura?
Desde muy joven, me atraía poderme expresar con el dibujo, creando mi propio espacio. También me gustaban las matemáticas y la física y me pareció una disciplina fascinante en la que poder desarrollarme en muchas facetas.
Cada proyecto es diferente, al igual que el entorno donde quedará reflejado físicamente. ¿Cómo se unen ambos conceptos?
Materializar un concepto, hacer realidad una idea en una situación concreta, sin ésto no concibo la Arquitectura.